Y no, la respuesta no es la guía
de LoonelyPlanet. Bitch, please…
He aquí la guía random de novelas para hypear antes de tu escapada este verano.
Y no hablo de novelas que
simplemente transcurren en ese lugar, si no que la historia se embebe
especialmente en el sitio, transmitiendo al 100% la sensación de estar allí, o
al menos las ganas de estarlo en breve.
ESTADOS UNIDOS.
Empezamos por el emplazamiento
MÁS utilizado en la historia de la literatura para cualquier historia, desde un
relato corto hasta la Enciclopedia Larousse
novelada.
Aquí no voy a recomendar novelas,
sino a dos autores que transmiten genial el ambiente americano, pero no el de
grandes ciudades como Nueva York, Los Ángeles o San Francisco, sino el de la
América profunda, la de los pueblos que se recorren atravesando su única calle
en torno a una carretera desierta.
Para jóvenes: John Green; para
adultos: Joël Dicker. ¿Y qué es lo mejor? Que son perfectamente intercambiables.
A mí es que hasta me cuesta catalogar a Green como autor de literatura juvenil,
si no fuera que todos sus protagonistas tienen menos de 20 años (aunque sus
problemas NUNCA sean de jóvenes de menos de 20 años, véase el ejemplo aquí)
Y en cuanto a Dicker… ¿por qué
recomendar a un suizo como el mejor “ambientador” para tu viaje pre-américa?
Lo puedes leer en este post sobre 7 datos y 2 predicciones sobre Joël Dicker.
ITALIA.
Voy a empezar por el topicazo: Come, reza, ama es un libro para leer
antes de tu viaje a la Toscana. Aunque este libro (no, no vale con ver la peli,
creédme) transcurra en 4 países diferentes, la parte de Italia es casi la más
extensa.
Y otra recomendación personal que
yo leí antes de viajar: Ángeles y
demonios, de Dan Brown, antes de visitar Roma. De verdad que mola mucho
recorrer todos los lugares que salen en la novela, especialmente porque no
todos ellos son las atracciones principales de la ciudad. En un lugar con
tantísimo que ver, mola reconocer cosas que no son las más demandadas.
La verdad es que Dan Brown sirve
para muchas ciudades, porque cuenta con la ventaja de que su protagonista
recorre los lugares descritos en las novelas. Puedes, literalmente, seguir sus
pasos: París y El Código Da Vinci,
Florencia e Inferno o Washington y El símbolo secreto.
Aquí no dejéis de aprovechar el
potencial de los clásicos españoles. Y no hablo sólo de pequeños detalles como
el Jardín de Calisto y Melibea (La
Celestina) en Salamanca, o Burgos y El
Cid Campeador. El mejor ejemplo que os puedo poner es La Regenta y la ciudad de Oviedo. Si pasáis por la ciudad, no
dejéis de hacer “el tour de La Regenta” (lo organiza el ayuntamiento de
Oviedo), que os narra la historia mientras se visitan todos los lugares que
salen en la novela. Vale muchísimo la pena. Imaginaos si a mí me gustó, que
tras volver de las vacaciones me tragué sin anestesia las 800 páginas, con
spoilers y todo.
Si vais a visitar el norte,
llevaros en la maleta cualquier novela de Dolores Redondo. No os servirá como
guía-a-lo-Dan-Brown, pero os meterá en un ambiente místico y acogedor que
maridará perfectamente con vuestro viaje.
¡Ah! Y una última recomendación,
también para norteños. Si os animáis con el Camino de Santiago, podéis echarle
mano al comic “Un noruego en el camino de Santiago”. No solo son preciosas las
imágenes, a pesar de su extrema sencillez, sino que transmite muy bien el
sentimiento que puede acompañar al viaje hoy en día, en un momento en el que
parece difícil rescatar el sentido de peregrinaje, sacrificio o recogimiento
que implica el trayecto con tanta gasolinera, cervecería y asfalto.
LA ANTÁRTIDA.
No hace falta querer ir a la
Antártida para leer Dónde estás
Bernadette, porque querrás ir después de leerla. Y no, no es que la novela
transcurra allí (se desarrolla en Seattle, EE.UU., de hecho) pero la joven hija
de la protagonista desea ir allí de vacaciones, y con la cantidad de detalles
que recopila para convencer a sus padres de que la lleven, no se me ocurre
mejor guía turística. En mi caso, de hecho ha conseguido que incluya este viaje
entre mis “imposibles antes de morir”.
PARA TODOS LOS DEMÁS DESTINOS…
No puedo hablar de “literatura
para viajes” sin mencionar la “literatura de viaje”. ¿Y quién es su máximo
exponente? El gran Javier Reverte. Si os apetece algo más tipo crónica, incluso
de lugares de los que pensáis que no encontraréis nada, tenéis que leerle a él:
África, Nueva York, Irlanda, Centroamérica, Alaska y Canadá, China, Roma,
Grecia, el Ártico,… En serio, no habrá rincón sin narrar por él.
Y si sois de Tenerife, no os podéis
perder en octubre PERIPLO – El Festival Internacional de Literatura de Viajes y Aventuras.
Muchas gracias por tus recomendaciones. El verano es la mejor época para leer y relajarse!
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