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MUJERES QUE COMPRAN FLORES, de Vanessa Monfort

Título: Mujeres que compran flores
Autora: Vanessa Monfort
Editorial: Plaza y Janés / Booket
Género: Romántica
Páginas: 448
Sinopsis: En un pequeño y céntrico barrio de la ciudad hay cinco mujeres que compran flores. Al principio, ninguna lo hace para sí misma: una las compra para su amor secreto, otra para su despacho, la tercera para pintarlas, otra para sus clientas, la última... para un muerto. La última soy yo y ésta es mi historia. 

Después de la pérdida de su pareja, Marina se da cuenta de que está totalmente perdida: había ocupado el asiento del copiloto durante demasiado tiempo. Buscando empezar de cero, acepta un trabajo provisional en una curiosa floristería llamada El Jardín del Ángel. Allí conocerá a otras mujeres muy diferentes entre sí pero que, como ella, se encuentran en una encrucijada vital con respecto a su trabajo, sus amantes, sus deseos o su familia. De la relación entre ellas y Olivia, la excéntrica y sabia dueña del local, surgirá una estrecha amistad de la que dependerá el nuevo rumbo que tomarán sus vidas. 

¿Lo peor? El libro es demasiaaaaaaado reflexivo. Sí, con todas esas "áes". Si algo le falta es acción. Y no hablo de persecuciones policiales por centros comerciales ni peleas ninja en el ático de un hotel de lujo. No, digo que los personajes hablen, se muevan, ejecuten acciones y que lo hagan sin darle vueltas a un pensamiento a lo largo de ocho párrafos. Un ejemplo: el 30% inicial del libro consiste en la presentación de los personajes, especialmente de la protagonista. Hasta que no llevas unas 150 páginas no empiezas a ver cuál es el conflicto que se pretende desarrollar en el libro. Es muy desesperante, la verdad. Después de eso, empiezan los problemas de las seis protagonistas (sí, seis. Yo hasta casi el final no conseguía distinguirlas por sus nombres... ¿cuál era la que tenía problemas con su marido y cuál con su jefe? Aún no podría decíroslo) y se solucionan con muchas quedadas tomando vinos, vermuts, sangrías y demás... la novela es una especie de Sexo en Nueva York pero sólo con las escenas donde las protagonistas comparten sus problemas en una cafetería, sin nada más de movimiento.
¿Otra cosa que me horrorizó? Que haya un momento en la novela en la que la AUTORA se mete A SÍ MISMA en la historia, con su PROPIO NOMBRE, y también a su EDITOR y OTRO COLEGUITA suyo (que ni idea quién es... ¿su pareja? ¿su amigo famoso?)... vete a saber... En fin, que sí, que de repente la autora irrumpe en una escena y se presenta a sus personajes, y con la misma vuelve a desaparecer, sin ningún otro aporte a la historia. Horrorizada me quedé.

¿Lo mejor? Me gustan las reflexiones feministas de la novela. Aunque ya van un pelín anticuadas para la revolución que estamos viviendo, está bien ver como cada una de las seis protas plantea sus problemas con el mundo, especialmente el mundo masculino. Se reflexiona mucho sobre las trabas que nos ponemos a nosotras mismas, sobre el miedo a tomar decisiones o la actitud pasiva que muchos tenemos en nuestra vida frente a los cambios. 
Otra cosa que me gustó mucho fue la ambientación en el Barrio de las Letras de Madrid. Sinceramente, al principio me pareció demasiado obvia, y pensé que hubiera sido mejor situarlo en ese emblemático lugar pero de una manera más sutil. Aún así, más adelante, sí me gustó la mención de rincones o cafeterías que, la verdad, tengo curiosidad por averiguar si existen de verdad. 

Puntuación: 2/5

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